Ideas al viento

Sabina: ¿Pero las musas de dónde vienen? ¿De dó vienen?

Serrat: ¿De dónde vienen o van?
Quien lo sabe...
Pero las musas vienen y van.
Pero hay una que se empeña
en darme en la boca el pan.
Una musa madrileña,
con acento catalán.

Recuerdas aquella vez cuando leías los primeros escritos en mi blog?

Decías que seguramente debo escribirle a supermodelos,
yo respondí que no, que no escribía para nadie en específico
sin embargo ese día supe que quería escribir para ti...

Y empezamos a salir, a conocernos
y así empecé a mirar adentro de tus ojos (de tus ojazos he de decir)
empecé a ver mas allá de tu cuerpo
a notar que detrás de tu escote escondías un bellísimo corazón
un corazón que necesitaba ser querido
un corazón urgido de atención

Y empecé a necesitarte
empecé a extrañarte
si, empecé a enamorarme
a no pedir mas que me dejes quererte

Y lo hubiera dado todo por ti
estaba (estoy y estaré) dispuesto a jugármela por ti.

Y nada de esto ha sido apenas suficiente para tratar de retenerte
no tengo mas para ofrecer
solo tengo este tonto corazón enamorado
este absurdo querer quererte

¿te preguntas a que viene todo esto?

Pues me robo la idea inicial del diálogo de Serrat y Sabina

¿qué es una musa?
¿de dó vino?
¿a donde va?

Una musa es quien me inspira
quien hace nacer en mi ese "algo" que me incita a escribir
quien provoca en mi estas sensaciones únicas

Pero, ¿que es una musa?

Lo defino mejor cambiando la pregunta:
¿quien es una musa?
¿quien es mi musa?
La respuesta solo hay una: Tú

¿de dó vino?
No lo sé, simplemente apareciste

¿a dónde va?
Sólo se que muy lejos de mi lado
pero, aunque no lo sepas, te quedarás

Amor mío, tú eres mi musa, y así te vayas... te quedarás
así como a estas ideas... el viento se las llevará